viernes, 10 de mayo de 2019

Salchichas, atropello, vértigo y sindicato.


Salchichas, atropello, vértigo y sindicato.

Es un atropello suicida lo que hacen con los sindicatos de clase, mientras el estado los subvencione, jamas serán sindicatos de clase, escribo esto mientras ensució el papel de rojo ketchup, al comerme el perrito caliente, no estamos en 1978 donde se luchaba por los trabajadores y se conseguía logros importantes, ahora están dormidos, no sueñan, no pelean a pie de calle, no quieren o el poder no les deja moverse, el sindicato debe ser libre, desde donde el único ingreso provenga de las cuotas de los trabajadores. 
Hoy lo digo desde fuera, al dimitir un día desde el vértigo de mis adentros. 

Es lo que tiene de hablar de salchichas. 
¿Volveremos a caer en los mismos errores? 
Volveré a soñar, haber que pasa. 

Manu 

Reto II

Nunca habían sabido quien era aquella niña que aparecía en la foto familiar de la bisabuela; 

Después de sesenta años he sabido quien era esa niña de la foto, sin nombre ni fecha.
En mi casa siempre fue un misterio, pero esa foto siempre encima del mueble de pino con una vela encendida...

A la muerte de mi abuela, dejo la nota escrita, de quien era esa niña. 
Hermana de mi abuela, llamada Amalia, que fue secuestrada y violada por un hombre de la aldea, amigo de la familia, se la llevó engañada al puente del rio, donde consumó el acto más pueril del ser humano, en la nota lo decía, lo detuvieron a los tres meses y lo condenaron al garrote vil, donde pago su deuda con la sociedad, pero eso no es suficiente para la familia que pierde una vida tan joven. 
De ahí todo este hermetismo en todos estos años, nada se hablaba de ella.... 
....solo una foto en blanco y negro y una vela encendida para esa vida arrebatada de aquella manera.

Ahora a mis años me he enterado del crimen tan atroz de la hermana de mi abuela. 

De ahí que siempre vistiera de negro luto.

Manu 


Reto I

La foto sin un rostro 

Era un pueblo pequeño, y todos los vecinos estaban al tanto de toda su gente, habladurías, miradas mal intencionadas, cuando mi madre y yo nos cruzábamos por las calles, la plaza y en el colmado.

Tuve la fortuna de viajar a la ciudad, para mis estudios universitarios, con el sacrificio de mi madre y sin un padre, pude sacarme la carrera de económicas. 

Recuerdo el día de mi graduación que vino a verme el padre Julian, párroco del pueblo, no entendía que hacía allí haciéndose una foto ese día tal especial para mi. 

El día que llego la foto, le arranque la cabeza y me quede sola con mi madre y un señor sin cara en blanco y negro, con sotana, manos en una postura a forma de corazón inacabado. 

A la muerte de mi madre, me confesó que ese señor era mi padre, y por eso todo el pueblo sospechaban de la supuesta relación que había, ya que no se había estado con hombre alguno ni del pueblo ni de fuera, ya que yo era la encargada de abrir la iglesia y limpiarla y preparar todo para las ceremonias, y fue el quien me ayudo para pagar tus estudios, si hija mía estábamos enamorados pero era un pecado que he llevado todo este tiempo, por eso antes de morir quería que lo supieras, y en ese momento cerró los ojos para siempre, y se le quedó una sonrisa en sus labios, con la felicidad de haberse quitado un peso de encima, que cargo ella sola toda su vida.

Me quede con una tristeza, por la confesión, ya que de haberlo sabido antes, le hubiera dado las gracias antes de fallecer unos años, ahora entiendo esas miradas, ese despreció, ese vacío que nos hacían en el pueblo,cuanta  hipocresía hay en el ser humano, empezando por la iglesia y esta aún dia sociedad que vivimos, golpeando de una y otra vez los pecados que ocultamos. 

Manu   


Reto

Una botella de vino, un bote de Vick Vaporub, un ovillo de lana con sus agujas, y el libro de ruta de Ana Belén, Victor Manuel, Joan Manuel Serrat y Miguel Rios...


Llevaba varios días con una gripe del copon, estuve a Vick Vaporub, y me tocaba ir a cuidar a mi abuela, no me hizo falta perfume alguno, ya llevaba el olor característico a una moto sin escape, al entrar, vi a mi abuela sentada con sus agujas de punto y su ovillo rosa, hacia ropa para sus muñeca, que la habían regalado hacia un año, mientras la observaba me puse a leer el libro de ruta de Ana Belén, Victor Manuel, Joan Manuel Serrat y Miguel Rios.

Al mismo tiempo escuchaba esa música de antaño, donde recordaba mis veinte años, en los conciertos donde acudía con mi primera novia, desde aquí les doy las gracias a tanto talento juntos, música y poesía que aprendi a escribir a través de ellos, y mi mención especial a Joaquín Sabina, que me inspiro algunos de mis versos. 

Solo somos el espacio entre la fecha de nuestro nacimiento y el de nuestra muerte.
En eso se resumirá nuestra vida...
        ...lo demás es mentira.

Y mi abuela con su punto y seguido.

Manu 

Texturas

Texturas 

Aún siento la textura de tu piel y de tus sueños, con mis dedos recuerdo los acordes que te tocaba, sonaban como las nubes disiparas en el aire, como los esquís deslizándose por la nieve en polvo, como un bolero en mi boca, y esos besos que no te he dado, pero imaginarios en mi soledad. 

Mientras escuchaba el cante del Sinsote, melodiosos trinos de suavidad entre los árboles verdes de primavera, y me recordaba al sonido de mis caricias en tu cuerpo recién salido del agua tibia del rio.

Y a media noche me levante a picar esas habichuelas que sobraron en la comida, no debía de haberlo echo, porque aunque la ventana estaba cerrada hubo vientos esa noche. 

Y entre sonidos de habichuelas y trinos de Sinsotes, sentí los acordes, entre texturas de sabores. 

Manu 


Pájaros

Pájaros 

El plumaje de azul intenso 
la mirada intacta y blanca 
frente a frente los picos 
y la naturaleza de fondo
donde yo me hallo...
...solo en ti pensando. 

Manu 

Cuerpo y bosque

Cuerpo y bosque 

Déjame llenarte de sonidos tus vacíos...
 ...para sientas la textura de mi piel centenaria. 

Manu 

Despertar

Despertar

Para tu despertar mis versos están.
mis besos a tu boca van,
mis manos están donde deben estar
y la rosa en ti despertará.

Manu

Los cuatro


Los cuatro

Y la música se hizo cielo.

Manu

Rojos corazones

Rojos corazones 

No preguntes ahora que estas deseando mi cuerpo.
Cuando estoy atrapado entre líneas blancas y rojos corazones.

Manu

Imagenes con texto

760

 La mejor poesía que he leído