Amor de una vida y una muerte.
Y quemé la casa en un arrebato de locura, como hicieron con roma.
¿Fue Nerón quien quemó roma?
¿Fui yo quien rompió tu corazón?
Yo que soñaba envejecer junto a ti
Que pensaba cuidarte hasta lo infinito
Y lo infinito era poco para mis manos y mis ojos
Inesperadamente me quede solo una noche de primavera
No volviste a mis brazos ni a la locura de mis labios
Como un loco desesperadamente salí a buscarte
Volví al lugar donde te conocí, junto al acantilado y abajo la cala desierta donde nos amamos tantas veces en cerradas noches
Entre las rocas vi tu pañuelo suave, gris floreado
Se me encogió el corazón, me invadió la tristeza más indeseable para mi alma.
Ahora me di cuenta que tú enfermedad te llevaría al suicidio, ya me lo
decías que antes de morir sin fuerzas en una cama, morirías con todas
tus fuerzas fuera de ella.
No me queda otra que irme contigo, antes
de que me ahoguen las lagrimas que tanto pesan en mis ojos y abrasan mi
cara, prefiero hundirme en la mar como navío viejo para reunirme
contigo, que volver a casa con el corazón vacío.
Nunca pensé en la muerte ni la he sentido tanto como en tu maldita partida.
Ya no te esperaré con una flor en la mano, el beso preparado, el abrazo
por detrás, las risas antes del sexo, las palabras que improvisaba y te
susurraba en versos después de amarte, las sabanas blancas de raso ya
no abrigarán la piel, tosca será la mortaja en que nos envolverán.
Espérame amor que ya me reúno contigo, ya el amor no vuelve, solo
quedara entre los dos el silencio de la muerte, ni una carta de adiós,
ni una palabra al corazón.
Voy amor a tu encuentro, a tu frío
cuerpo, digo adiós al viento, a este sol que abrigada mi caída, al aire
que respiraré hasta contigo ahogarme...
...para ser como eramos antes, dos cuerpos en uno.
Adiós vida, adiós corazón afligido en dolor.
Adiós, adios...amor.
Manu