Legado
Me satisface saber que cuando no esté, mi legado será estar en tu sangre, en los cuentos inventados de tus noches, en el aire que respiramos en el parque.
Seguiré en la sangre de tu hijo diluida por otra nueva sangre, en la piel de tus manos, en los versos contados, en la testarudez de tu infancia.
Ahí estaré, en las calles dormidas, en los amaneceres besando tu mejilla, en las idas y venidas a tus clases de ballet por las tardes, en tu mirada de niña.
Estaré siempre en tu nombre compuesto, en tu gracia bautizada, en tu comunión toda de blanca, es hermoso recordar, pero no tanto que no estás.
En la música que escuchabas, los programas de la tv, sola sentada, atenta y asombrada por las princesas, también estaré en los vídeos familiares, en los espacios que han quedado al romper las fotos con mi cara.
Estaré, te prometo que en todo el pasado estaré.
Manu
sábado, 19 de agosto de 2017
Perdido
Perdido
Tus besos me saben a seca sangre
El jardín marchito a cementerio
Herrumbre en mis sueños
Apesadumbrado buscando la sombra
Como un zombi voy y vengo sin destino
Y no me importa la gloria
Solo por el lamento del alma, se que sigo muerto.
Manu
Tus besos me saben a seca sangre
El jardín marchito a cementerio
Herrumbre en mis sueños
Apesadumbrado buscando la sombra
Como un zombi voy y vengo sin destino
Y no me importa la gloria
Solo por el lamento del alma, se que sigo muerto.
Manu
Canción de destrucción
Canción de destrucción
Ahogadas en semen se me fue la soledad
Las tres gatitas en celo se escaparon por la ciudad
Por los barrios bajos del olvido
Por los fondos altos de mis bolsillos
Y las fundas de almohadas acabadas
Buscan más la perdición
Más hombres que llenen sus vidas y el interior de sus vaginas.
Y entre pastilla y pastilla
Las medias rotas a girones
Olvidadas en los callejones
Con polvo blanco de angel
Rezan a sus dioses malditos
Con las uñas afiladas
Durmiendo en cualquier esquina
De orines y mil sabores
Descansan las víboras del pensamiento
Hasta coger el sueño en suciedades.
Y piensa el ciego
Otro día más por el suelo
Vendiendo la suerte y los sueños
Estas tienen dueño
Los iguale para hoy
Canta el vendedor
Canta el gallo su mañana
Cantan los cuernos incompletos de abortos y alborotos
De tuétanos tiernos y arropados
No pueden más algunas
Con jeringuillas en el brazo
Otra se pasó de birras y polvo blanco destilado
Las sirenas suenan
Haciendo su trabajo más abajo
De la calle del suicida.
Otra vez vuelven a su trabajo
A quien le importa
Una más o una menos
Que ya la llenara otro
Con el semen de un ahorcado necesitado.
Rosas negras de ciudad
Y polvos blancos por necesidad.
Manu
Ahogadas en semen se me fue la soledad
Las tres gatitas en celo se escaparon por la ciudad
Por los barrios bajos del olvido
Por los fondos altos de mis bolsillos
Y las fundas de almohadas acabadas
Buscan más la perdición
Más hombres que llenen sus vidas y el interior de sus vaginas.
Y entre pastilla y pastilla
Las medias rotas a girones
Olvidadas en los callejones
Con polvo blanco de angel
Rezan a sus dioses malditos
Con las uñas afiladas
Durmiendo en cualquier esquina
De orines y mil sabores
Descansan las víboras del pensamiento
Hasta coger el sueño en suciedades.
Y piensa el ciego
Otro día más por el suelo
Vendiendo la suerte y los sueños
Estas tienen dueño
Los iguale para hoy
Canta el vendedor
Canta el gallo su mañana
Cantan los cuernos incompletos de abortos y alborotos
De tuétanos tiernos y arropados
No pueden más algunas
Con jeringuillas en el brazo
Otra se pasó de birras y polvo blanco destilado
Las sirenas suenan
Haciendo su trabajo más abajo
De la calle del suicida.
Otra vez vuelven a su trabajo
A quien le importa
Una más o una menos
Que ya la llenara otro
Con el semen de un ahorcado necesitado.
Rosas negras de ciudad
Y polvos blancos por necesidad.
Manu
Apego recuerdo
Apego recuerdo
Estás en nuestra memoria
En el aire preñado de los pulmones
En los sueño dormidos de las noches
Canciones para no olvidar
Tu nombre de profeta
Altos vuelos de recuerdos
Estas encendido en una estrella del cielo
De vez en cuando nos lo haces saber, con la luz de las perseidas.
Que se van apagando al caer.
Yo aquí, tu allí, lejana distancia para yo ir o tu volver.
Manu
Estás en nuestra memoria
En el aire preñado de los pulmones
En los sueño dormidos de las noches
Canciones para no olvidar
Tu nombre de profeta
Altos vuelos de recuerdos
Estas encendido en una estrella del cielo
De vez en cuando nos lo haces saber, con la luz de las perseidas.
Que se van apagando al caer.
Yo aquí, tu allí, lejana distancia para yo ir o tu volver.
Manu
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